El Colgado, ¿una forma alternativa de ver las cosas?

Ancient Tarot Of Lombardy
He escrito mucho denunciando esa equivocada tendencia a convertir cartas negativas en positivas reestructurando su significado para convertirlas en algún tipo de aprendizaje. La Muerte se convierte así en renovación, la Torre en algo equivalente a una eyaculación o a una explosión liberadora, etc. Tendencia que también podemos ver en la actual astrología psicológica. Aparentemente deberíamos evitar dar malas noticias y convertir todo mensaje en una energía que nos permitirá evolucionar. Hace unos años un tarólogo algo conocido durante una entrevista se prestó junto a su entrevistador a dar un consejo con una sola carta perteneciente a los arcanos mayores del Marsella, salió la Muerte y ambos se quedaron sin aliento e hicieron un gesto como “uy, madre mía, qué hacemos con esta carta”, pero se recompusieron y el entrevistado buscó la forma de dar una respuesta positiva, pero como sintió que no era convincente sacó otra carta y salió la Torre. Podrán imaginar cómo estos Bateleurs se acomodaron en la silla para unir ambas cartas en un bonito consejo de autosuperación.
 
Dejando de lado esta tontera New Age, el Colgado es otra carta que se reestructura para encontrarle un lado positivo, un significado clásico consiste en convertir un estado de inmovilidad impuesto por el entorno en una elección personal, como puede serlo el “sacrificio”. No, el Colgado no está colgado de un pie porque eligió estarlo, lo colgaron para castigarlo públicamente por algún delito que ha cometido (antiguamente a esta carta se la llamaba el Traidor). Pero, la reestructuración consiste en decir que se cuelga voluntariamente para llevar a cabo algún tipo de sacrificio. El Traidor-Colgado se convierte de esta manera en Odín, que voluntariamente se colgó del Árbol de la Vida para alcanzar la iluminación.
 
Pero no es el único significado empleado para quitarle negatividad a la carta. Hace unos días una tarotista obtuvo esta carta en una secuencia y, para mi asombro, se puso contenta, dijo que la carta le confería la posibilidad de ver las cosas desde otro ángulo. Cuando me cuenta esto estaba a punto de hacer algo que la perjudicaría mucho, y con esfuerzo logré convencerla del error que estaba a punto de cometer. No, la carta no le estaba diciendo que conquistaría otro punto de vista sino que nada podía hacer y, que en su situación tratar de actuar la conduciría a meterse en un problema del que no podría salir. Es más, la carta podría estar diciéndole que la posición en la que se encontraba en esa situación no le permitía ver con claridad lo que ocurría. Lo que me lleva a pensar que cuando alguien se encuentra en la posición del Colgado, no sólo no puede hacer nada para salir de esa inmovilidad, sino que es muy probable que no pueda ni siquiera confiar en su propio juicio para encontrar alguna salida.
 
Sé que lo que escriba sobre esta carta caerá en saco roto, porque ese estilo de eliminar todo lo malo de la vida convirtiéndolo en una oportunidad evolutiva se ha enquistado en el mundo de lo esotérico, por lo que al Colgado lo han convertido en Odín. Pero aún quienes se afilian a esta tendencia se sobresaltan cuando la Muerte, la Torre, el Colgado o una carta negativa aparecen en una lectura. Esto quiere decir que la negación funciona sólo en parte, porque podemos mentirnos, pero sabemos que nos estamos mintiendo.


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