Algunas ideas en torno al empleo de cartas invertidas con el tarot

Original Rider-Waite Tarot

Me preguntan mucho sobre este tema, he escrito algunos artículos donde expreso algunas ideas en cuanto a su uso, pero noto que algunos de mis amigos se desconciertan porque yo no las emplee habitualmente.

Es cierto, me encuentro más cómodo evitando su uso, además, de esta manera obtengo un sesgo más positivo en las lecturas. Existe otro motivo por el que no las empleo. Tradicionalmente su empleo tiene el propósito de facilitar la obtención de un SÍ o un NO en una lectura. Sin embargo, ni siquiera con todas las cartas invertidas se puede dar un NO seguro, siempre hay que leer las cartas.

¿Qué valor posee entonces el empleo de cartas invertidas con el tarot? He encontrado dos. El primero para diagnosticar una situación. Evidentemente las cartas invertidas representan puntos energéticos debilitados en una situación, algo pasa ahí. Una chica llega con un problema acusando a su pareja de muchas cosas, en la tirada ella aparece como una reina de algún palo invertida y las cartas que la representan están invertidas. En esa relación la energía problemática era ella, se encontraba fuera de control y generaba conflicto. Con las cartas sobre la mesa debió admitir que quien vivía pinchando a su pareja era ella y que también era la fuente del conflictivo. Con cartas al derecho también hubiera visto lo mismo, pero no con tanta contundencia. Las cartas invertidas generan en nosotros una respuesta emocional muy intensa, una molestia particular que conduce nuestra vista hacia esos puntos.

Pero existe otro motivo para su empleo. Particularmente cuando debemos comenzar un proyecto de algún tipo. La astrología electiva se encarga de encontrar el mejor momento para comenzar algo, de manera que la suerte juegue a nuestro favor y no en contra. Con las cartas podemos, en parte, elegir un momento entre varios, pero no necesariamente el mejor momento porque no podemos rastrear la posición de los astros hasta que se encuentren en las posiciones que deseamos.

Sin embargo, la suerte es un componente esencial en la marcha de cualquier proyecto. Una vez nos encontramos participando en uno, deberemos aceptar lo que se nos dé, aunque disponemos de opciones para aprovechar de la mejor forma la suerte que nos caiga. Pero al comenzar un proyecto, sí debemos contar con el máximo de suerte. El momento de inicio de cualquier ente animado, un proyecto lo es, posee su carta natal y las potencialidades con las que cuenta. Si las potencialidades son escasas, nos costará mucho salir adelante,

Supongan que estoy por comenzar un proyecto y le pregunto a las cartas si debo hacerlo, el 80% de las cartas se encuentran invertidas. No necesito hacer la lectura, las cosas no están dadas, pero esto no quiere decir que más adelante cuando madure mejor el proyecto sí lo estén.

Puedo pensar que el proyecto no es viable o, que aún no lo he madurado lo suficiente. Muchas veces luego de seguir trabajando en la idea y reformularla, noto que el número de cartas invertidas disminuye, ya voy tomando el control de las energías en mal estado que antes me hubieran impedido progresar con el proyecto.

El punto de inicio de cualquier actividad siempre es el más importante, los astrólogos lo saben, en estos debemos contar con un absoluto control de las energías con las que nos manejaremos, por lo que el empleo de cartas invertidas para asegurarnos de que vamos por el camino correcto será esencial.

Si pregunto si me concederán un premio, un préstamo, si ganaré un maratón, me darán un trabajo, etc., mejor no emplear inversiones porque necesitamos disponer de un sesgo positivo en la lectura. Si debo diagnosticar una situación, sí, las inversiones me llevarán directamente al núcleo del problema. Ni hablar si debo comenzar algún proyecto, aquí las inversiones son imprescindibles, porque el momento de inicio de cualquier actividad contiene la semilla de la misma. No habrá nada que pueda desarrollarse si no se encuentra en esta semilla.