¿Me casaré el año que viene?

Tarot Waite-Smith Borderless Edition

Una chica desea saber si su relación pasará a otro nivel, lo que implicaría casarse el año que viene. Decidí preguntarle directamente a las cartas si se casaría el año que viene. El motivo por el que expongo esta tirada es el de mostrar cómo las cartas emplean la dialéctica entre las cartas que salen al derecho y las que se invierten para expresar algún mensaje con ello. El peor lector de cartas del mundo leería en esta tirada que no habrá casamiento, es más, posiblemente se dé una ruptura completa de la relación por ello.

Contar el número de cartas al derecho y al revés y ver cuáles predominan en número, da pistas para obtener un sí o un no, pero no siempre acierta, lo que nos obliga a leer la tirada para proporcionar una mejor interpretación. Aquí tres cartas están al derecho y dos invertidas, pero la respuesta es no. Al contar cartas también hay que tener en cuenta la posición de las mismas, porque tres invertidas al comienzo y dos al derecho al final, puede indicar que lo que iba mal se enderezó y las cosas se arreglan al fnal. Independientemente de esto, si las cartas al derecho son como la Torre o la Muerte, o una carta alta de espadas, de poco sirven estar al derecho.

Veamos qué ocurre aquí, dos de las cartas al derecho son arcanos mayores y se espejan en la tirada, para más dato, son los únicos arcanos mayores, por los que determinarán la respuesta. Un Emperador seguido de una Torre y conectados por un 5 de oros invertido. En primer lugar podemos suponer que el hombre en esta relación es dominante, es quien quiere definir la dirección de la relación, y quien, además, parece tener ese poder. La Torre es una consecuencia directa de ello.

Pero además, no hay cartas de copas o alguna que indique que hay amor ahí, la carta central es un 5 de oros invertido, lo que me hace suponer algún interés económico en formalizar. Pero esos mendigos unidos por la miseria, pasan por debajo de la ventana de una iglesia, pero sin entrar para formalizar la relación.

Supongo que están pensando lo mismo que yo, que esta mujer quiere casar al tipo para asegurar su futuro económico, pero él no cae en la trampa. Hay cartas de lucha de defensa de espera. Una posibilidad que expuse fue la de que él no quería llevar la relación a otro nivel porque quería esperar a encontrarse en una mejor posición económica, no sentía estar preparado aún. Aclaré que esa posición llevaría a grandes fricciones, pero evité mencionar que la relación se desmoronaría, como la Torre lo augura, porque sería una información que podría influir negativamente en la consultante.

Me felicitó por la lectura debido a que se sentía muy identificada con mis palabras. Un par de días después me contó que lo había abandonado debido a que quería que se fuera a vivir con ella, pero de casamiento nada. Destacó que buscaría otro hombre.

Confirmó con sus acciones lo que suponía, no había amor, sólo interés, y como este hombre se negaba a darle lo que ella quería, lo dejó y sale a buscar a otro que sí se lo proporcione.