¿Qué ha aportado Enrique Enríquez a la Cartomancia?

Tarot de Marsella Convos

Vamos a comprobar, nuevamente, lo sobrenatural como fundamento de la cartomancia. ¿Cómo lo comprobamos? Al descubrir que unos cartones pintados son capaces de responder con impresionante precisión a nuestras preguntas. Tal vez, lo sobrenatural sea sólo aquello que aún no podemos explicar satisfactoriamente, aunque, para mí, lo sobrenatural es aquello que desafía las leyes de causalidad del Universo y, expresan, no sólo un contenido “inteligente y con intencionalidad”, sino que a todo esto se agrega la existencia de un innegable vínculo entre el fenómeno y nosotros mismos. Si lo espiritual existe, debe encontrarse en este reino de fenómenos. 

Volviendo al ejercicio, preguntemos qué ha aportado Enríquez a la Cartomancia. Al ver estas cartas, alguien podría pensar que las he seleccionado a propósito por resultar tan explícitas, pero no, han salido así espontáneamente. ¿Qué cosa más sobrenatural podemos encontrar que esto? 

Comienza la tirada con la Sota de espadas, carta que algunos llaman la carta del espía, aquel que observa atento lo que ocurre para decidir si es necesario hacer algo. Es una carta de espadas, implica peligro, tal vez riesgo, preocupación. La lectura de cartas siempre constituye un riesgo de algún tipo, especialmente por las consecuencias de equivocarnos. El método de Enríquez enfatiza el “mirar originario”, sin prejuicios. Que la tirada comience con la carta del espía enfatizando el mirar atento a los detalles, nos indica que está respondiendo a la pregunta. Uno de sus primeros libros se llama “Mirando el tarot de Marsella”. Luego las tres cartas centrales destacan la segunda parte de su aportación, no sólo exhorta a mirar, sino a contar lo que está sucediendo en la secuencia (generalmente de tres cartas, ampliable cuando las cartas de los extremos miran hacia fuera de la tirada). Pero también debes estar atento a tus sentimientos, ¿qué sientes al ver estas tres cartas? A partir de lo que está sucediendo, de las acciones más básicas y los sentimientos más básicos, debes elaborar una historia que una todos estos elementos. ¿Cómo se combinan éstos para crear una historia con sentido a partir del contexto y la pregunta formulada? La Rueda de la fortuna puede dar la clave, las cosas generalmente se relacionan entre sí a partir del sentido que las vincula. El destino une las distintas cosas de nuestra vida en torno a un sentido general que puede ser leído en lo que nos rodea, las cartas sólo son un artificio para focalizar el mensaje. De cualquier manera, esta carta debe alertarnos con respecto a la creencia de que poseemos un control total sobre nuestra vida. La elaboración del relato tiene como premisa un elemento sobrenatural, que muchos llaman destino, en la construcción de nuestras vidas, y al leer las cartas lo incluimos como "necesidad". Al decir "esto puede ocurrir", lo decimos de forma de dejar en claro que no dependerá de las acciones del consultante. Si el As de bastos representa nuestra voluntad y capacidad de acción, esa energía se encuentra con la Rueda de la Fortuna, el implacable destino que compartimos con otros, 3 de copas.

La carta final deja en claro que la lectura se expresa atento a las resonancias emocionales en el consultante, ¿qué cosas del relato tienen vida para él conmoviéndolo? Porque, al final, quién elige lo que tiene sentido es el propio consultante. Puede que aquello sin vida que lo habitaba, despierte con el relato, generando una nueva línea de acción en su vida. he notado qué, muchas veces, alguien consulta con el "adivino" con la esperanza de que algo nuevo cobre vida en ellos. Esperan despertar de un sueño que se ha convertido en pesadilla. La última carta ha sido muy clarificadora para mí, a pesar de haber estado expuesto a la fenomenología de la cartomancia desde hace bastante tiempo. Estos pequeños aprendizajes, tan significativos, son los que nos vuelven adictos a la cartomancia.

As de bastos y 3 de copas, destacan el nivel experiencial sobre el que Enríquez trabaja para crear el relato, siempre se mantiene en el nivel más básico, evitando la construcción de teorías más elevadas que, puede que no tengan sustento en las imágenes. La mejor forma de equivocarse pasa por querer decir más de lo que las cartas nos dicen. También, pueden expresar que, intencionalmente, trata de no responsabilizarse por la lectura. Puede tener sentido en un mundo de lo esotérico donde venden fiabilidad del 100 % en todos los productos y servicios que están a la venta. Mejor pecar por menos que equivocarse. Yo mismo planteo mis lecturas como hipótesis, como tales, podrían estar equivocadas.

Creo que la carta central deja en claro que el ejercicio de la cartomancia siempre consistirá, en una forma u otra, en la lectura de la buena fortuna, porque lo que se busca saber es cómo la Buena (o mala) Fortuna se está configurando en nuestras vidas. Cosa qué, posiblemente Enríquez no comparta.

La razón de ser de todas las artes adivinatorias para por la existencia de un principio rector, que opera a partir del valor simbólico de todo lo que se encuentra en nuestras vidas, dirigiéndolas, a veces en el sentido deseado, la mayoría de las veces en un sentido no deseado. Pero cuyas líneas de fuerza pueden ser observadas y, gracias a ello, permitirnos adecuarnos lo mejor posible a éstas.

Me parece que el ejercicio ha sido fructífero, las cartas se han comportado de maravilla.