La Muerte es la muerte

Serravalle Sesia Tarot

Hoy es viernes 13, así que es un buen día para hablar de la carta de la Muerte en el tarot. Hace unos días alguien preguntó en un grupo, qué carta representaba a la muerte física, comenzaron a exponer las combinaciones más diversas de cartas, entre medio dije “La Muerte”, fui el único que mencionó esta carta, quien preguntó dio likes a todos menos a mí. Queda descartado que el like me importa poco, sólo me interesa destacar el desconocimiento de la naturaleza de esta carta. Es como si se quisiera desterrar a la muerte de la vida. En algunos tarot de Marsella no lleva nombre, lo que incita a que algunos le den un nombre aún más misterioso: “el arcano sin nombre”. Quienes además desconocen de física, apelan a aquella famosa ley que dice: “nada se destruye, todo se transforma”. Esa ley habla del intercambio entre la energía y la materia, donde una puede transformarse en la otra, pero desgraciadamente desconocen otra ley igual de importante, la que habla de la degradación de la energía a causa de la entropía. Que la materia o la energía permanezcan, no implica que un organismo pueda mantener la vida eternamente. Si muero, muero, aunque mis átomos permanezcan. Si un rayo destruye una catedral, el material con el que estaba construida puede quedar desparramado por la tierra, pero la catedral ha sido destruida. Es cierto que puede ser reconstruida, pero un organismo vivo que pierda su vida y se descomponga, no puede recuperar la vida. Porque quedará la materia que lo conformaba, pero no la vida.

Cuando la energía que representa a la carta de la Muerte aparece en la vida de una persona, algo morirá para siempre, y no es cierto que haya transformación, o metamorfosis a un estado mejor, no, la muerte mata para siempre, o degrada o mutila. Una persona puede estar enferma y curarse, puede romperse un hueso y éste soldar, pero cuando en un tema de salud aparece la Muerte, no habrá recuperación de lo que se haya perdido. Por ejemplo, en un problema de la vista, la Muerte puede anunciar la pérdida de capacidad visual, esa capacidad no podrá recuperarse, pero el afectado podrá empleas gafas. Siempre que la Muerte nos toca perdemos algo, y lo perdemos para siempre. Si aparece en un vínculo amoroso, la relación terminó para siempre, porque si así no fuera, aparecerían otras cartas, como la Torre, cartas de espadas, etc. Pero si aparece la Muerte es para decirnos que es para siempre. Aquí no habrá transformación o renovación, se terminó y punto. Porque esa es la idea de fondo de esta carta.

Un hombre fue tocado por esta carta, la consecuencia fue un daño muy importante en su hombro. Con el tiempo y fisioterapia recuperó algo de movilidad, pero lo que murió, no se pudo recuperar. En algún momento se podrá reemplazar cualquier parte del cuerpo por una nueva, pero aún en ese caso, lo que muera quedará muerto.

Dos cartas hablan de la muerte física: la Muerte y el Mundo. Muchos saltarán y dirán: pero el Mundo es una de las mejores cartas del tarot. Sí, lo es, pero algunas veces anuncia la muerte en casos de que ésta se espere, por ejemplo, en una enfermedad grave. Posiblemente por aquella frase que dice: “pasó a mejor vida”. Tal vez, para alguien que está sufriendo de una enfermedad terminal, morir sea un triunfo, porque se libera del sufrimiento. Así que si en uno de estos casos aparece el Mundo, presten atención a las cartas que lo acompañan, porque puede estar anunciando una muerte.

En el mundo Marsella es costumbre la de tomar un detalle insignificante de la carta y tornarlo en lo más significativo, pasando a leer la carta desde ese detalle. Que la Muerte no tenga nombre en el Marsella, da lo mismo, quien no le puso nombre en una versión, habrá tenido sus razones, razones que no me importan. Tampoco que los posteriores fabricantes de cartas continuaran con esta costumbre. Porque el deporte de los marselleses de crear enigmas a resolver donde no los hay, a mí no me va. No me importa porqué en algún momento histórico a alguien se le ocurrió no ponerle nombre a esta carta.

En fin, si algo no ocurre cuando aparece la Muerte en una tirada, es la renovación. Porque la carta aparece para decirnos precisamente eso, que lo que muere muerto quedará.