El dilema en el 6 de oros

Original Rider Waite Tarot

Aprovechando los 20° del segundo mes de Otoño salí a caminar para hacer ejercicio y pensar en algunas cosas. Poco a poco se fue instalando un tema en mi pensamiento, el del 6 de oros. Ayer mismo debí volver a la discusión que tanto me agota acerca de que en la carta de Los Enamorados no hay una elección, cosa que no trataré ahora porque ya lo he hecho ampliamente en el blog, pero de pronto me descubrí hoy en una elección difícil de llevar a cabo con el 6 de oros.

Hace un par de meses tomé una decisión, abandonar un proyecto e iniciar otro similar, y se me ocurrió preguntarle a las cartas qué obstáculos debería superar para ello. No voy a colocar aquí la tirada, pero la carta central era la del 6 de oros y la anterior el 4 de oros invertido. Al toque me di cuenta de cuál sería el gran obstáculo, no ser capaz de abandonar el proyecto anterior por el segundo. El 4 de oros invertido me decía que no sería capaz de soltar el proyecto anterior, cosa que debería hacer para que toda mi energía se enfocara en el segundo, y el personaje central del 6 de oros está privilegiando al mendigo de su derecha, el pasado, destinándole 3 oros mientras que al de su izquierda, el futuro, sólo 2.

Pero una cosa es ver una tirada y otra muy distinta vivir lo que cada carta representa. En este tiempo posterior a la tirada he vivido ese dilema, el dilema de elegir (balanza), de comparar para decidir a cuál dedicarle mis recursos. Y el proyecto anterior se llevó casi todo, logré avanzar algo con el segundo, pero siempre con la balanza en mano para compararlos y decidir con cuál seguir. Todavía no he salido de la energía de esta carta, posiblemente nunca salga y continúe con ambos proyectos, no enfocándome completamente en ninguno.

A esto se agrega que, como caminé mucho, estas ideas continuaron desarrollándose, y me percaté de los dos mendigos. Cada uno representando a uno de los proyectos, ¿merecen mi atención y recursos? ¿No serán proyectos destinados a la marginalidad? Porque uno de los rasgos que caracterizan a los mendigos es el de la marginalidad, también el de la pobreza, claro, pero no son proyectos económicos, pero sí pueden ser marginales. La satisfacción personal es lo único que me empuja a seguirlos, pero sabiendo que serán sólo para mi disfrute personal. Tal vez ese sea el motivo por el que la balanza no se inclina hacia ninguno, porque la decisión consiste en determinar cuál de los dos posee una mayor chance de salir de su marginalidad, y tal vez el primero lo sea por un margen demasiado pequeño.

Pienso ahora que una de las ideas de esta carta podría consistir en que la decisión que debe tomar el personaje central, no es tanto la de determinar cuál de los dos mendigos necesita más ayuda, sino cuál podría salir de su marginalidad con la ayuda adecuada y ayudarlo a él.

En fin, si desean buscar cartas donde haya que llevar a cabo una elección a partir de los pro y los contra, busquen una que contenga una balanza.